La prímula, planta del mes de febrero
Nombre científico: Primula vulgaris
Nombre popular: Flor de San José
Familia: Primulaceae
Origen: Oeste y Sur de Europa, noroeste de África y suroeste de Asia
Lugar de cultivo: Exterior e interior, sin mucha luz directa
Temperatura: Entre 14 y 18 ºC
Suelo: Sustrato bien drenado, rico en materia orgánica.
Nivel de cuidados: Bajo-Medio
Riego: Cada 2-3 días
Características de la prímula
El género al que pertenece la prímula está integrado por alrededor de 550 especies vivaces y perennes que destacan por su larga floración, su fácil cuidado y su resistencia al frío.
Entre las múltiples especies que se cultivan, dos merecen especial atención: la Primula acaulis, popularmente conocida como Flor de San José o Primavera, e ideal para plantar en el jardín o la terraza; y la Primula obconica, para cultivar en interiores.
La Prímula acaulis es una planta de jardín perfecta para los meses más oscuros, ya que sus colores frescos aportan luz al espacio. No tiene tallo y sus flores se asientan directamente sobre las hojas. Esta especie es muy resistente, y florece en invierno o a principios de primavera.
La Primula obconica tiene un tallo largo de flores y está disponible en diversos colores, como azul, rosa, blanco o naranja. Las flores se encuentran al final de los tallos en forma de bola.
Cuidados de la prímula
En el interior deben estar situadas en una habitación sin calefacción, donde la temperatura no suba de los 18 grados, para que las flores duren más tiempo. Tienen que recibir una iluminación intensa, pero no sol directo y evitar que reciban corrientes de aire.
El sustrato se debe mantener húmedo, pero no mojado, y abonarlas cada tres semanas con un fertilizante líquido. Hay que intentar que el suelo sea suelto y mullido, fresco y rico en materia orgánica, pero que cuente con un perfecto drenaje.
Si las flores y las hojas cuelgan marchitas, es el momento para regarlas. La eliminación de las flores muertas fomentará la producción de nuevas flores. Una vez que la planta ha terminado la floración, la prímula puede ser plantada en el suelo al aire libre. Después de un par de meses la planta florecerá de nuevo.
Significado de la prímula
El nombre científico de la prímula deriva del vocablo latino primus, que significa primero, y que alude a su precoz floración. De hecho, son una de las que primero florecen en primavera, así que son las anunciantes de esta colorida estación.
Pero más allá de su significado original, la prímula tiene un significado espiritual. A raíz de sus pétalos en forma de corazón, la prímula se asocia con el amor, el romance y la pasión. ¡Por eso es ideal para regalarla a tu pareja!
En otras ocasiones, la prímula se relaciona con los nuevos comienzos y el optimismo. Así que, si quieres desearle lo mejor a un amigo que empieza una aventura personal, entregarle una prímula es un detalle que nunca olvidará. ¡Le dará buena suerte!
Propiedades de la prímula
La prímula es mucho más que una flor decorativa. Algunas de sus especies como la Prímula veris tienen multitud de propiedades:
- Balsámica, mucolítica y capaz de reducir la fiebre: Por eso se emplea remedios contra la gripe y la sinusitis.
- Diurética: Es muy útil en casos de retención de líquidos e infecciones urinarias.
- Depurativa: Se emplea como ingrediente en cosméticos para eliminar granos, eccemas o imperfecciones de la piel.
- Antirreumática: Se usa como tratamiento de refuerzo nutricional en casos de artritis.
Quizá también hayas escuchado hablar del aceite de prímula, pero, ¡no te confundas! Este aceite se extrae de la onagra, que también se conoce como prímula, pero no pertenece a la familia Primulaceae. Por eso, cuando escuches hablar del aceite de onagra, has de tener en cuenta que no se ha extraído de la Primula vulgaris.
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