Tagetes, la planta del mes de marzo

Características del Tagete

Esta planta, también conocida como clavel de moro o clavel chino, entre otros nombres, tiene su origen en México. Se podría pensar por ello que es una planta de climas cálidos y húmedos, pero lo cierto es que es una planta para todo el año, sobre todo en zonas como el sur de Europa donde las temperaturas no son muy extremas.

Existen multitud de variedades de esta planta, de entre las que destacan la Tagetes Patula y la Tagetes Erecta.

Es una planta de tal belleza que puede ser el elemento central de cualquier jardín o terraza llenándolos de vida y luz. Sus flores de color amarillo, naranja e incluso bicolor llaman tremendamente la atención. Su olor es especialmente intenso sobre todo en ciertos momentos del día y su floración te hace disfrutar de gran parte del año, ya que florece desde primavera hasta finales de verano.

En la actualidad, el tagete tiene multitud de usos que no dejan de sorprendernos. En ciertos países se utiliza para extraer tintes para textiles o como fragancia.

También puede ser utilizado como elemento medicinal en forma de infusión para aliviar la tos. Esta maravillosa planta contiene además propiedades cicatrizantes y antiinflamatorias. Sus propiedades son comparables a su belleza.

En México es una de las plantas habituales con la que sus ciudadanos rinden homenaje a sus difuntos el Día de los muertos.

Pero sin lugar a dudas, la característica que la hace increíblemente valiosa es que sirve como plaguicida. Bueno, en realidad es un repelente natural, por lo que se utiliza en huertos para repeler nemátodos.

Cuidados del Tagete

Esta planta requiere ciertos cuidados, aunque ninguno que suponga una gran dificultad ya que es una planta que se adapta a casi cualquier temperatura.

Luz solar

Es una planta de exterior que necesita sol. Lo ideal sería que pudiera darle el sol durante varias horas al día. Podría adaptarse a interior y zonas de semisombra pero siempre necesitando unas horas de sol directo. Las buenas condiciones de luz pueden evitar que la planta sufra enfermedades y plagas.

Riego

El tagete tiene unas raíces muy compactas que no retienen mucho el agua, por lo que necesitan un riego frecuente, especialmente durante la época de floración que es cuando son más exigentes. Lo recomendable es regarla entre 2 y 3 veces por semana, evitando la acumulación y estancamiento de agua. Lo ideal sería el riego por goteo y siempre evitando que caiga el agua en la flor.

No está de más aplicar fertilizantes líquidos creados específicamente para plantas con flor. En este caso lo mejor es incluirlo en el agua de riego cada 15 o 20 días.

Tierra

En cuanto a la tierra, necesita que esté húmeda pero sin encharcar. El suelo debe contar con un buen drenaje, y el sustrato, siempre que sea posible, deberá ser ligeramente ácido, bien suelto y con una cantidad no muy abundante de materia orgánica. Dicho esto, es una planta que no es demasiado exigente.

Enfermedades y plagas

Realmente no es una planta muy propensa a sufrir plagas y enfermedades, pero existen algunas que debemos tener muy presentes si queremos tener una planta llena de flores.

• Mosca blanca: Las hojas se vuelven verde claro en pequeñas manchas y se crea una película de polvo negruzco.
• Pulgón: Los pequeños insectos negros van chupando la planta hasta debilitarla.
• Trips: Las hojas se debilitan y se enrollan sobre sí mismas.
• Orugas: Son plantas que les atraen. En este caso, al verse a simple vista, basta con retirarlas de manera segura.
• Como en otras plantas, las flores pueden marchitar, pueden aparecer manchas marrones, o se puede producir envejecimiento de la planta.

Si estás interesado en esta hermosa planta, visita nuestros centros de jardinería y estaremos encantados de ayudarte y asesorarte para su plantación y cuidados.