¿Cómo conseguir una boda con encanto en un entorno natural?

Crear una boda con encanto en un entorno natural en el que la luz del sol juega a nuestro favor es fantástico. Pero además debemos contar con flores y elementos decorativos que nos acaben de  ayudar a la hora de crear esos rincones con encanto que nadie olvidará. A continuación, te ayudamos a elegir aquellos lugares más atractivos dentro del espacio elegido para la boda. ¡Consigue tu boda con encanto!

 ¿Cómo y dónde crearemos rincones con encanto?

                    A la entrada

¡Qué mejor manera para recibir a los invitados que hacerlo con una preciosa frase de bienvenida! Con ella ya sacaremos la primera sonrisa a los asistentes. ¡Y de esta manera les hacemos partícipes de nuestra ilusión!

Los entornos naturales son propicios para decoraciones a base de flores silvestres, hiedras y elementos decorativos como las jaulas, los cestos de mimbre y las pacas de paja.

                    En el lugar de la ceremonia

Sin lugar a dudas el lugar con encanto que más nos motiva decorar es el de la ceremonia. Para ello continuaremos con los mismos elementos y tipos de flores que usamos en la entrada para decorar un momento único e irrepetible.

Alfombra, macetas de barro pintadas del color de las flores, cestos de mimbre, cajas de madera, papelinas para el confeti o los pétalos, etc. Todos ellos son elementos indispensables para conseguir una boda llena de encanto.

                    En algún lugar que sea muy transitado

En un espacio natural los rincones atractivos que podemos encontrar son muchos. Nos sirve cualquier pared de piedra, o una zona de arbolado, o una esquina acogedora. En fín, como tenemos donde elegir, trataremos de sacarle el máximo partido a ese rincón.

Las ramas de hiedra y eucalipto, junto con algún pequeño banderín, jaulas y pacas de paja, crean una armonía perfecta con el ambiente natural.

                    A la puerta del hotel de los novios

Un rincón que es realmente acogedor y que llama al romanticismo es el creado en la puerta de entrada al hotel en el que se alojan los novios. La paniculata blanca y rosa llenando los cestos de mimbre crea un rincón delicado y maravilloso.

                    En la zona del aperitivo

¡Qué preciosa queda la señalización  en la zona del aperitivo! Yo diría que es el rincón que más curiosidad despierta entre todos los invitados. Todos miran si aparece el nombre de su lugar de procedencia.

Pues ya veis que con todo ello podemos conseguir una boda con encanto en todos y cada uno de los rincones del espacio natural.